Oaxaca es el estado de la República Mexicana con
mayor diversidad étnica y lingüística del país, contiene 570 municipios los
cuales se distribuyen en 7 regiones que son: la Mixteca, Valles, Costa, Sierra Sur, Istmo,
Sierra Norte, Papaloapan y Cañadas. Cuenta con 18 grupos étnicos, cada uno con sus
respectivas lenguas. Esto dificulta la centralización y planificación de las
políticas públicas en el estado.
El
origen real de la crisis actual es por el choque entre las mineras y las
comunidades indígenas, debido a que estás comunidades están en contra del
saqueo de Oaxaca y la entrega de estas regiones geopolíticas al TPP quien
choca con los usos y costumbres del multiculturalismo étnico del estado.
El magisterio de Oaxaca en el 2006
encabezó uno de los movimientos populares más movilizadores e influyentes del país,
el cual tuvo rasgos de insurgencia. Fue
en ese año en que surgió la “Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca” (APPO)
como una expresión social de rechazo al gobernador Ulises Ruiz por gran parte
del estado, acusándolo de ser un político corrupto y tirano que quiso engañar a
los maestros y a todos los oaxaqueños con promesas incumplidas.
En aquel año era tanto el rechazo
ciudadano hacia este gobernador que la gente se organizó y tomó un rumbo de
autogobierno muy peligroso para el presidente en turno Vicente Fox, quien mandó
tropas militares y policíacas para desarticular ese intento de insurrección
social.
Hoy nuevamente Oaxaca comienza a vivir
una nueva etapa de organización y movilización social motivada por una reforma
educativa laboral generando represión y violencia; alimentada y motivada por algunos
niños que vivieron la experiencia de la APPO desde las aulas y en las
barricadas quienes han retomado el movimiento dando paso a una nueva etapa de
lucha popular.
Aurelio Nuño, ignorante de la
historia de los movimientos populares, sociales y de insurgencia sobre todo los
del sur del país, ha tratado de imponer la reforma laboral educativa mediante amenazas
de despido a miles de profesores inconformes, además de las detenciones de los
líderes del magisterio disidente lo que ha generado violencia y matanzas que
solo desestabilizan más al país.
En diciembre del 2014, siendo aún
secretario de la Presidencia de la República, Nuño expresó las siguientes
palabras en el marco de las movilizaciones que entonces iniciaban por la
desaparición de los estudiantes de la normal rural de Ayotzinapa:
“No vamos a sustituir las reformas por actos teatrales con gran impacto,
no nos interesa crear ciclos mediáticos de éxito de 72 horas. Vamos a tener
paciencia en este ciclo nuevo de reformas. No vamos a ceder aunque la plaza
pública pida sangre y espectáculo ni a saciar el gusto de los articulistas.
Serán las instituciones las que nos saquen de la crisis, no las bravuconadas”.
El punto es que Oaxaca corre el riesgo de alborotarse aún más por la
crisis de gobernabilidad, aunado al problema en la estrategia de comunicación;
lo que dará lugar a una nueva etapa en la reorganización popular de movimientos
sociales debido a la falta de experiencia de negociación política. Y por ende
el surgimiento de una nueva versión de la APPO más radical que hace 10 años lo
que dará como resultado un nuevo conflicto social que impactará las intenciones
del PRI de ganar las elecciones del 2018.
La suma de errores sólo lleva a la derrota, ya que la violencia y la
represión solo generará más violencia y rebeldía mal encausada.
Pero nada justifica la matanza despiadada de seres humanos por las
luchas de poder y las competencias entre egos.
“El respeto al derecho ajeno es
la paz”
Benito Juárez.
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